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Familiares y afectados homenajean en Madrid a Máximo Abete por su compromiso con el daño cerebral

08/06/2012

Familiares y afectados llegados de varios puntos de España rindieron un homenaje en Madrid al que fuera presidente entre 2004 y 2008 de la Federación Española de Daño Cerebral (Fedace), Máximo Abete, que falleció el año pasado después de haber trabajado durante años en favor de este colectivo.

Abete, que impulsó "el crecimiento y la profesionalización" de Fedace durante su mandato, estuvo vinculado al movimiento asociativo del daño cerebral adquirido desde 1994, cuando participó en la creación de la asociación Adacen de Navarra.

"Sensato y comprometido", el exdirigente de Fedace era también "tremendamente exigente consigo mismo y con el trabajo de los demás", que, junto al suyo, sirvió para hacer visible el daño cerebral y para profesionalizar a las entidades que luchaban por su mejora, aseguró en el homenaje la actual presidenta de la entidad, Amalia Diéguez.

Ejemplo de ese trabajo compartido fue su participación activa en el movimiento asociativo de la discapacidad como miembro del CERMI, un órgano también presente en el homenaje para recordar su figura.

Así, Luis Cayo Pérez Bueno, presidente del citado comité, recordó su paso por esta plataforma, a la que enseñó, según dijo, a conocer y a dimensionar en su justa medida el daño cerebral, un problema con el que hoy viven unos 420.000 españoles.

Al igual que el presidente del CERMI, Alberto Durán, secretario general del CERMI y vicepresidente ejecutivo de la Fundación ONCE, alabó la personalidad de Abete y destacó logros tales como la consecución de un día para el daño cerebral, el 26 de octubre.

A juicio de Durán, el sector de la discapacidad tiene que trabajar unido, "con más ánimo que nunca, con alianzas entre lo público y lo privado y sin perder la especificidad", es decir, que sean los afectados y familiares quienes pongan voz a los problemas y necesidades del daño cerebral.

En la misma línea que Durán se pronunció Ignacio Tremiño, director general de Políticas de Apoyo a la Discapacidad, quien subrayó la importancia que tienen para las familias actos como éste, en los que se homenajea a figuras que han puesto en marcha entidades y proyectos muy importantes para la discapacidad.

Puesto que el homenaje tuvo lugar en la Casa Encendida, de la Obra Social Caja Madrid, Tremiño y Durán confiaron en que ese escenario siga siendo, como hasta ahora, "la casa de los servicios sociales y la discapacidad", algo con lo que la entidad está comprometida, según afirmó en el acto Gloria Belloso, directora del Departamento de Atención Mayores de la mencionada caja de ahorros.

Cuadernos FEDACE

El homenaje, que contó también con la presencia de Francisco Fernández, de la Fundación GMP, concluyó con la presentación de dos cuadernos realizados por Fedace para aglutinar conocimientos y experiencias dirigidas a mejorar la atención de afectados por daño cerebral.

En concreto, estos cuadernos, que son también herencia de Abete y que tienen su origen en talleres, versan sobre el llamado síndrome de vigilia sin respuesta y de mínima conciencia y sobre la importancia del deporte en el daño cerebral.

El primer manual, elaborado con "vocación de utilidad", trata de ofrecer herramientas fiables para ayudar a los profesionales a detectar el síndrome de vigilia sin respuesta, además de hablar de la importancia de la rehabilitación y de la integración del paciente y de terminar creando un modelo de atención para él.

El segundo, por su parte, hace hincapié en la necesidad de promocionar el deporte de base entre las personas con daño cerebral, mediante la creación de coordinadores o figuras dedicadas a este fin dentro de las asociaciones.